CREAR TEMA

Interesante para debatir. A mi entender el plantel tiene los jugadores necesarios para crear juego; el tema es que el técnico prioriza a veces el orden táctico y la recuperación (que obviamente son importantes) en el armado del 11 inicial.

Es clave tener la pelota pero más importante aún es saber qué hacer con ella. Si podés hacer las dos cosas bien sos el Barcelona. Para el resto de los mortales es muy difícil, por eso hay que aprovechar al máximo los 10 o 15 minutos de gloria que se presentan por partido.

Por otro lado, existe un error de concepto bastante común. Nos cansamos de citar a grandes jugadores de otras épocas (sobre todo los creativos) y decimos "ya no existen más".

No existen más porque el largo proceso que los llevó a ser lo que fueron hoy es absolutamente inviable. Sólo hay paciencia para los genios. Si en 4 partidos no sos el Kun, sos "medio pelo" y por lo tanto prescindible. Y a veces, ni siquiera los más dotados pueden completar 3 partidos seguidos jugando los 90 min.

El autor cita a Garnero (en mi modesta opinión, lo mejor después del Bocha) y tiene razón. Sería una maravilla tener un jugador así. Lo que habitualmente no se dice es como Garnero llegó a ser Garnero.

Cuando debutó (año 91) era tremendamente hábil y su juego pasaba esencialmente por gambetear. No era el jugador cerebral que después fue. Cuando no andaba bien el "pecho frío" era moneda corriente. Algo parecido pasó con el Bocha en los inicios. Era un pibito lleno de rulos que literalmente apilaba rivales. El gran estratega aparece bastante después del debut.

Como muy bien apunta el Yoruga, hacer goles o correr no es sinónimo de jugar siempre bien pero lamentablemente hoy es lo único que necesita un jugador para hacer pie en un grande.

Es lo que está pasando con Benítez. La mayoría de los hinchas lo hubiesen regalado hace un año atrás. Sin embargo, cada partido juega un poquito mejor que el anterior. Pasa a uno o a dos rivales y la pasa al compañero mejor ubicado. A veces busca el toque de primera. Cuando debutó con el Pelado sólo podía soñar con hacer lo que hoy hace. El único secreto para el que tiene una mínima condición para algo es la continuidad.

Algo similar pasó con Mancuello.

Si bajamos un poco la ansiedad y bancamos a este plantel, vamos a ser campeones otra vez.

Con el Cebolla bien, Benítez y Pisano tenemos de sobra para elaborar. El tema es que a ese circuito se le tienen que agregar los demás y por sorpresa. Lo que hacen Méndez y Mancuello en algún momento lo tienen que hacer todos. Especialmente los laterales.

En los grandes equipos, casi todos llegan a posición de gol. Esto es lo que nos está faltando.

Acaso la última jugada agónica de Cuesta nos está mostrando un poco el camino a seguir.