Lunes 28/11/2016, 13:24:38
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Seguramente Milito va a renunciar en breve, porque esta situación no se remonta fácilmente. Un técnico surgido del club que sea cuestionado dura un par de fechas más y allí termina su vínculo. Además, no hay dirigentes que puedan tener la mínima idea de sostener a un técnico cueste lo que cueste. El gran problema es que va a llegar otro técnico y quizás haga una campaña aceptable, saque buena cantidad de puntos, gane algunos partidos con cierta entereza, pero muy difícilmente Independiente pueda pelear algo serio con este plantel y con esta disposición a echar o inducir la renuncia de técnicos cada temporada. ¡Qué técnico de prestigio puede llegar en estas condiciones! Así, abonamos el terreno para los arribistas que se van quedando sin equipo dos o tres fechas antes y llegan por intermediación de los representantes. Ganan dos partidos, pierden después un par y empieza a girar otra vez esta rueda.
Lo único que hoy puede pelear Independiente es una Copa Sudamericana, que desde ya es una copa poco seria, como se ha evidenciado en los últimos años. Está bien disputarla y ganarla, te da pases para otras copas, pero no es ninguna corona de laureles ganarla. Es el reflejo de la antigua Conmebol que, por lo menos en Argentina, jugaban los perdedores que habían hecho campañas aceptables. Podremos ganarla alguna vez pronto, pero quedaremos cada vez más lejos del horizonte que nos merecemos, que es el de ganar torneos locales, disputar de igual a igual con los otros equipos grandes y aspirar a una nueva Copa Libertadores con la dignidad que debe caracterizar a Independiente. Lo otro es llenar de humo la tribuna, como lamentablemente se ha llenado de humo el plantel, el banco de suplentes, la directiva y tristemente la historia reciente del club.