CREAR TEMA

Como ya dijeron, no nos pusimos en lugar de pelea del campeonato. Tuvimos la posibilidad de aspirar a quedar en posición de lucharlo, que no es es lo mismo que efectivamente pelearlo, y con la cantidad de puntos que hicimos tampoco hubiéramos sido campeones de ser un torneo corto. Y marco eso porque para mi ahí está el problema, cualquier cosa positiva que pasa en Independiente se la magnifica a un nivel que roza lo ridículo, probablemente por todos estos largos años de dar asco sistemáticamente, entonces ante la buena enseguida hay toda una manada que se piensa que somos capaces de ganar el Mundial de Clubes (como ejemplo alcanza con ver los comentarios previos a Boca, no solamente referidos a ese partido sino a todo el contexto general de esas semanas).

Los mismos que ante cualquier cosa ven resurrecciones de la mística, de la época de gloria, del Independiente temido por todo el mundo, del club que ganaba en todos lados y en cualquier contexto, son los mismos que hacen esto que vos marcás en este tema. Nada más que la exageración en el primer caso cae simpática porque son cosas lindas, un mundo de fantasía al que todos aspiramos llegar, mientras que la exageración en el segundo caso genera la irritación. O sea, el grado de boludés de las cosas que se dicen es el mismo, cambia la forma en que nos cae nada más. Y en ambos casos están generadas por lo mismo, la exageración. Hasta hace un par de semanas parecía el foro el del Real Madrid después de ganar la segunda Champions consecutiva, y ahí eran pocos los que marcaban que de esa nube de pedos siempre deriva el tremendismo derrotista cuando la realidad nos pega en la cara.

El Independiente de Holan tiene el enorme mérito de habernos rescatado de mitad de tabla y de hacer una gran campaña, sobre todo teniendo en cuenta la cantidad de pibes que usó. Jugó bien algunas veces, otras regular, otras decididamente mal, hubo algunos (pocos) momentos de gran nivel, pero siempre mostró una idea y la capacidad de llevarla adelante de manera más que decente. De yapa nos dio la chance de ver a un equipo tener momentos de buen fútbol, cosa que no pasaba hace mucho. En conclusión, tanto él como el plantel tuvieron un trabajo más que satisfactorio. Lo que nos faltó fue jerarquía, y eso es responsabilidad en primer medida de la dirigencia y en segundo lugar de los técnicos anteriores que tuvieron millones para gastar y los dilapidaron pidiendo (o aceptando) cualquier muerto para reforzar el equipo, salvo algunas honrosas excepciones.

Lo que si es totalmente entendible es que haya muchos que hablen desde la bronca y estén calientes como una pipa, porque si jugando una final te errás un penal, definís como el orto de manera sistemática en las chances de gol y encima hacés la virgueada extrema de regalarle el empate a Lanús...no son cosas que uno pueda justificar, aunque no tienen que impedir ver lo que se hizo en este semestre y sobre todo con el material con el que se logró la mejora. Pero basta también de exagerar sistemáticamente cualquier cosa relativamente buena que se vea en Independiente,