No es cuestión de venderlo o no. -- No es cuestión de pagarle el porcentaje a Belgrano. -- No pasa por la voluntad de Rigoni. -- Independiente ya le puso el tachito en la cabeza pero nadie mordió todavía. Nadie puso el dinero en el escritorio. Cuando aparezca Don Dinero o su sobrino, Don Billetín", se termina la novela