Escrito por chino Outes
Me cuesta mucho coincidir con la opinión del autor del Topic, muchísimo. Esto último, en líneas generales, claro está. Puede haber alguna "cosita" puntual en dónde coincidimos, pero no es significativa a la hora de "explicar" lo que nos pasa.
Pero si se me permite, quisiera dejar una opinión (muy corta) respecto de "una línea de pensamiento" (no sólo del autor del Topic) de la que podría ser la causal del problema deportivo del Club Atlético Independiente.
Digo: pensar que cuando esté saneada nuestra economía institucional (incluida la cuestión financiera), volverán los logros deportivos, no es más que una expresión de deseo y no una realidad fáctica.
Por otro lado, tengo "malas noticias" para "esta línea de pensamiento": de ser cierto el postulado en cuestión, pasarán varias generaciones antes de que alcancemos algún logro o estabilidad deportiva, dado el nivel de endeudamiento que actualmente tiene nuestra Institución. La cuestión no es la deuda en sí, si no su administración. Para opinar de su administración (seriamente) habría que estar adentro del Club y conocer el formato de gestión.
Por eso, y siendo el tema de un muy extenso tratamiento (cosa que para no aburrir no lo voy a hacer) sólo vine a opinar que la "solución" deportiva, poco y nada tiene que ver con la deuda del Club.
El día que verdaderamente Independiente duela se entenderá....
Gracias por la opinión.
Amplio un poco la idea. Considero que el manejo o administración de la deuda es clave para el futuro (y sí, tranquilamente puede llevar varias generaciones) porque si no se hace extremadamente bien, estás condenado a vender cada vez que tenés uno o dos jugadores que hacen la diferencia.
El simple ejemplo de la venta de Rigoni basta y sobra. Mancuello en su momento.
En consecuencia, podés ganar campeonatos aislados (2002 - 2010) si se juntan los planetas pero los hinchas de Independiente aspiramos a otra cosa.
Para ser competitivos
constantemente, tenés que estar muy bien en los números.
No es casualidad que nuestra peor época deportiva coincide que nuestra peor época económica.
Esto no quiere decir que la actual comisión esté haciendo mal las cosas a este respecto.
Es más, de las últimas gestiones es por lejos la mejor en materia económica.
El buen jugador no brilla. Brilla el juego que produce ese jugador. Y a veces brillan por él jugadores menos jugadores que aquel que hace brillar el juego. Dante Panzeri.
Los 34 de Vaccari 
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