CREAR TEMA

GRACIAS. Nunca imaginamos coronar así como en la noche delmiércoles 13 de diciembre la intensa campaña de diez meses comandada por Ariel Holan. El Maracaná, convertido en vórtice de la violencia inusitada propia de una aguda crisis social y política como la brasileña, fue el mejor escenario posible. Todo un templo del fútbol simbolizaba esa noche a las glorias, las de pierna fuerte y templada en tierras propias pero también hostiles y extrañas. Esa noche tuvimos la convicción de haberlo logrado, en menos de un año volvíamos a pensar que se podía. Que se podía recuperar la mística y el amor por la camiseta honrando a los antepasados, los de sangre propia que nos llevaban a la cancha de chicos y los de las figuritas que venerábamos cada domingo. En menos de un año volvimos a soñar que se podía recuperar el fútbol, que no tiene porqué ser un mal menor una vez que los Bochini no existen más. Que podíamos vivir mucho más que simplemente tolerar la mediocridad y los chanchuyos a cambio de hacer “como que” y entonces tratar al fútbol como que no es un buraco de negociados, gritar los goles, discutir los lunes, sabernos el equipo de memoria. Menos de un año llevó salir del anonimato de las últimas décadas. ¡Qué satisfacción el jueves 14 en el laburo y en el barrio sentir los celos de la gente conocida, porque Independiente volvía a ser el orgullo nacional, no hay ni habrá otro club digno como el nuestro. Hoy, tan rápida e intempestivamente como llegó la alegría, se fue. Decenas de topics en el foro abundan en detalles, ¡para qué repetirlos! Sabemos de qué se trata y Holan lo confirmo en su carta, después lo reafirmó el prof. Kohan, incluso puede decirse que nuestro ex DT habló más de lo necesario, porque hasta el más boludo sabe que la máxima discreción es el abc cuando se está en medio de una causa penal. No amigos, no es Independiente nada más. Argentina es un PAÍS MINADO. Argentina es un país enfermo. Los expertos tienen un nombre técnico para esto: sociopatía. En nuestro queridopaís, aprietes donde aprietes sale pus. Tampoco es necesario describirlo. Abrí los diarios, escuchá los noticieros. Y tan feas están las cosas que es difícil saber qué es peor, si el mensaje (nuestra sociedad) o el mensajero (fake news). Las operaciones de prensa contra la memoria deportiva de Holan recién empiezan, la otra cara de los foristas que lloriquean como paraguayita engañada. Así las cosas, lo mejor es pensar que no es una pesadilla la incoherencia delirante que por estas horas parece Independiente. Todo lo contrario. Lo mejor es quedarnos con el sueño. Porque vivimos estos últimos meses una sueño delicioso. Fuimos pibes otra vez. Y fue tan pero tan real, que el sueño duró casi un año. Gracias Ariel. Ahora, a laburar.
Por ahí mi hijo, cuando sea adulto, me convenza y vuelva de su brazo al estadio.