CREAR TEMA

Escrito por rober58

Buen día todos!

Bueno, lamento si este tema no es más que de fútbol, ya que veo varios temas con otros intereses más proclives a la joda. No me molestan pero no me engancho porque no los entiendo, no cazo la onda por lo que mejor me mantengo al margen.

No obstante, celebro la participación.

Hoy traigo una reflexión a la que llego luego de un largo análisis, que me lleva a concluir algo, pero no quiero que me tilden de negativo:

Veo una contradicción muy grande en el Rojo de hoy.

Por una parte veo un plantel repleto de chicos jóvenes que con mejor o peor actualidad, con mejores o peores condiciones, piden oportunidades.

Por otro lado, veo en el banco un cuerpo técnico comandado por un tipo de una larga experiencia, pero sin grandes logros y que propone un juego "viejo", carente de agresividad, sin sorpresa ni explosión, que repetidamente termina prefiriendo la cierta seguridad de los jugadores grandes antes que recurrir a los chicos, a los cuales no es que les tenga confianza sino que los pone porque no le queda otra.

Yo me pregunto: ¿no precisamos definitivamente un cuerpo técnico que trate de "educar" (futbolísticamente hablando) a los chicos y genere un equipo que practique un fútbol moderno, adaptado a los tiempos que corren?

Veo que van pasando los Velasco, los Braian Martínez, los Da Rosa, los Chavez, los Medina y van pasando los Soñora, pasó Landaburu y siento como que se van desperdiciando lentamente como si generar nuevos valores fuera barato y cosa de todos los días...

Pasaron cuántos DT desde que volvimos a Primera (para poner una fecha de "reinauguración" ponele)... Almirón, Pellegrino, Milito, Holan, Bekcc, Pussy, Falcioni, Berón...

Alguno produjo realmente alguna revolución con jugadores del Club?

Alguno intentó modificar las cosas para obtener mejores resultados? Cuántos DT de la Reserva cambiaron?

Creo que lo mejor en ese sentido fue contratar a Griffa y lo peor dejarlo ir. Y también fue siempre positivo lo de Berón.

Pero si lo bien hecho no se continúa...habrá sido inútil.

Para eso se necesita paciencia y un proyecto a largo plazo. (O resucitar a los gallegos socialistas -no macristas- que hicieron del Rojo lo que fue y todavía queda algo.) Con un último campeonato en 2002, justamente, es lo que menos hay.