El dueño de una estación de servicio en Rusia (un loquillo astuto) decidió regalar combustible a todas las conductoras mujeres que aparezcan en bikini. A muchas de las cuales no les importa mostrar un poco de piel y beneficiarse de esta oferta.
"Cuando vi que entraba Bochini, me pareció que tocaba el cielo con las manos, por eso lo primero que hice fue tirar una pared con él. En ese momento sentí que estaba tirando una pared con Dios". Diego Armando Maradona.[b][/b]