A mí me gustan todos los sandwiches. Todos. -- Y como no soy discriminador, tanto le entro a la humilde mortadela de cuando éramos pobres, a un vacío, un chori o salmón rosado, y por mí, ponele palmitos, ananá y atún, y si querés, untale caviar, e inclusive, si se cruza un moderno new age vegetariano o inclusive el racista vegano, lo introducimos al estómago igual, enano.