CREAR TEMA

Escrito por Hombre_de_ningun_lugar

No soy economista, pero creo que hay cuestiones básicas que todos podemos entender y discutir. Sabido es que cuando el contexto internacional es favorable, cualquier librito puede funcionar, aunque siempre habrán políticas que favorecen más a unos que a otros. Pero en la difícil situación actual, donde el precio de la soja cayó y por ende la entrada de dólares disminuyó, es cuando se deben establecer prioridades y decidir por dónde se debe ajustar.

Que el consumo no debe superar la producción es una regla básica que nadie va a discutir. Pero si se toma el camino fácil y se hace el ajuste a partir de bajar el gasto público, reduciendo el poder adquisitivo de los trabajadores, también bajarán el consumo y la producción. Este tipo de medidas puede servir para combatir la inflación, pero es un arma de doble filo porque también reduce los sueldos e incluso puede incrementar el desempleo. El otro camino es seguir fomentando el consumo y la producción, teniendo como prioridad que el poder adquisitivo de los trabajadores no disminuya, aunque para esto haya que darle a la maquinita, generando inflación. Y aquí el bolsillo del laburante no se vería tan afectado si la inflación se compensa con el aumento de sueldos; lo que sí bajaría es el valor de los ahorros, del dinero que se halla inmovilizado. Entonces la decisión política está en decidir a quién perjudicar en el ajuste: al trabajador bajando los sueldos o al ahorrista bajando el valor de su capital monetario acumulado.

Mientras tanto también hay que adaptarse al contexto internacional para favorecer las exportaciones y la entrada de dólares, de manera que haya que ajustar la economía lo menos posible. Aquí más o menos todos los economistas van a coincidir en que hay que bajar las retenciones y establecer un valor competitivo del dólar. Pero de nuevo, el camino fácil y más directo es bajar los costos mediante la reducción de los salarios, para ser más competitivos en el mercado internacional: vendo más barato, me compran más. Y el camino que requiere más creatividad e ingenio es el de favorecer las exportaciones sin afectar el poder adquisitivo de los trabajadores, subsidiando donde sea necesario y recaudando en los sectores más privilegiados. Otra vez, la decisión política está en favorecer al que le tiene mucho o al que tiene poco.

Las soluciones mágicas no existen y en tiempos de crisis es cuando hay que decidir fríamente cómo repartir la torta. De esto se habla cuando se plantea que hay dos modelos de país a seguir, aunque algunos quieran desviar la atención con frases vacías de contenido como "quieren generar miedo" o "la unidad es más importante que el modelo".

Estoy de acuerdo y te doy puntos... pero está muy largo para este foro.