Hay estadounidenses que tienen un sentido más crítico hacia las decisiones políticas de su propio país que algunos de nuestros coterráneos, quienes por una cuestión de simpatía parecen justificar cualquier cosa que se haga desde el país norteamericano. No es de extrañar que quienes tienen esa mirada crítica también suelen tener talento y sensibilidad artística. Aquí hay un ejemplo: