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Viernes 13/10/2017, 23:30:45
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George Weah.
Porque está ganando la primera vuelta de las elecciones a presidente en Liberia, más de diez años después de presentarse por primera vez. Su compañera de fórmula es la ex mujer de Charles Taylor, un ex presidente condenado en La Haya por crímenes de lesa humanidad durante la guerra civil de Sierra Leona (Diamantes de Sangre, si alguien vio la película). Se dice que Taylor lo apoya, algo que Weah niega, aunque reconoce haberle atendido el teléfono cuando el viejo dictador lo llamó desde su prisión en Inglaterra. Lo raro es que Weah se le enfrentó cuando era mucho más poderoso, en los años 90. El futbolista del Milan pidió que la ONU interviniera en su país, y los muchachos de Taylor incendiaron su casa y violaron dos de sus primas. Siempre se puede estar peor. Liberia es una rara avis africana, país independiente desde mediados del siglo XIX, fundado con un sello republicano tomado de Estados Unidos, de quien también tomaron la bandera, y miembro fundador de las Naciones Unidas. Lleva sin embargo más de siete décadas sin una transferencia pacífica del poder. La actual presidente es Ellen Sirleaf, la primera mujer elegida jefe de estado en África, dos términos atrás, allá por 2006. Aquella vez le ganó a Weah en el ballotage. Ganó también el premio nobel de la paz, cuatro días antes de su reelección. Weah fue esa vez candidato a vicepresidente. A Weah lo critican por ser un ignorante. Él dice que es cierto, pero que se va a rodear de los mejores. Su slogan es "Change for Hope". Su contrincante tiene 73 años, es el vicepresidente y le dicen Sleepy Joe, porque se queda dormido en los actos. Argumenta que lo hace porque es un soñador.
Porque está ganando la primera vuelta de las elecciones a presidente en Liberia, más de diez años después de presentarse por primera vez. Su compañera de fórmula es la ex mujer de Charles Taylor, un ex presidente condenado en La Haya por crímenes de lesa humanidad durante la guerra civil de Sierra Leona (Diamantes de Sangre, si alguien vio la película). Se dice que Taylor lo apoya, algo que Weah niega, aunque reconoce haberle atendido el teléfono cuando el viejo dictador lo llamó desde su prisión en Inglaterra. Lo raro es que Weah se le enfrentó cuando era mucho más poderoso, en los años 90. El futbolista del Milan pidió que la ONU interviniera en su país, y los muchachos de Taylor incendiaron su casa y violaron dos de sus primas. Siempre se puede estar peor. Liberia es una rara avis africana, país independiente desde mediados del siglo XIX, fundado con un sello republicano tomado de Estados Unidos, de quien también tomaron la bandera, y miembro fundador de las Naciones Unidas. Lleva sin embargo más de siete décadas sin una transferencia pacífica del poder. La actual presidente es Ellen Sirleaf, la primera mujer elegida jefe de estado en África, dos términos atrás, allá por 2006. Aquella vez le ganó a Weah en el ballotage. Ganó también el premio nobel de la paz, cuatro días antes de su reelección. Weah fue esa vez candidato a vicepresidente. A Weah lo critican por ser un ignorante. Él dice que es cierto, pero que se va a rodear de los mejores. Su slogan es "Change for Hope". Su contrincante tiene 73 años, es el vicepresidente y le dicen Sleepy Joe, porque se queda dormido en los actos. Argumenta que lo hace porque es un soñador.
